Para quienes no lo sepáis, las carocas son unas quintillas jocosas y llenas de mala intención que desde hace mucho se ponen en la plaza de Birrambla (tal vez el centro de los centros de nuestra ciudad) durante las fiestas de Corpus. Desde el año pasado, yo incorporo mis carocas particulares, que os mezclo con las “oficiales”, ya visibles en la emblemática plaza y visitadas y comentadas por el granaíno medio.
Este año se comenta que son sosas y sin mucha gracia, pero eso es opinable y, en cualquier caso, hay que tener en cuenta nuestra malafollá, ese parámetro especial que dicta las claves de nuestro humor desabrido, ácido y extemporáneo.
Os inserto las fotos que ayer tomé en Birrambla, casi ciego de sol (de ahí que no estén muy en fino) junto a mis «creaciones» propias:
La crisis pasó factura
y al llegar las elecciones
castigó de forma dura.
Del PSOE los barones
buscando están soluciones.
En el caso de esta caroca, yo ya la tenía comentada en este blog (¡Ejem!) y alguien ha enviado una de temática parecida:
El Cárdenas periodista
escribió sobre esa cosa
diabólica y misteriosa,
vivaracha y siempre lista,
juguetona y peligrosa…
pasó ella en dos semanas.
Ella dirá lo que quiera,
que se ve bien embustera:
¡De cargo ya tenías ganas!
Sebastián, no seas tormento,
que el fascismo ya pasó.
Quítanos el monumento
que tu papá levantó:
ya se pasó el Movimiento.
Los palcos de Vicentico
estaban muy bien pensaos:
Yo abro mi chiringuico
pa que tós estéis sentaos
y además me gano un pico.
El boulevard, la Gran Vía
y más tarde Ganivet:
obras pa’ la burguesía,
que es quien te da de comer,
pero eso es marrullería.
De una infamia a otra va,
una detrás de la otra.
¡Lo que miente el Sebastián!
¿Cómo así podéis ganar?
Debe ser que tenéis potra.
A analizar resultados,
a buscar nuevas propuestas…
¡A espabilar, despistados!
Las urnas son las respuestas
del paro y los indignados.
Regresó al fin nuestro Egea,
que se editó su poesía.
¡Que todo el mundo la lea!
No valió la hipocresía
ni el olvido que sufría.
De nuevo está Pepe Torres
al frente de la alcaldía.
Las deudas, corren que corren,
que esto ya es una sangría
que engorda día tras día.
Las oficiales darán mucho que hablar. Las mías sólo esperan levantar una sonrisa y, si acaso, un comentario.
Alberto Granados
Pues no, no lo sabía. Me he divertido mucho leyendo este post. 😉
¡Gracias por hacer de mí una persona más culta a estas horas de la mañana!
Bxos
Esta vida es vida loca,
pero hay algo que es muy cierto:
En asuntos de carocas
en Granada hay un experto:
«El Granados», don Alberto.
Pues a mi las oficiales me dan vergüenza ajena y las tuyas no ¿Porqué será?
Me he divertido muchísimo y te agradezco enormemente el reportaje. No tenía ni idea de lo que eran las «carocas». Andalucía es imaginación y tú eres la prueba.
Un petó!
Alejandra, si es que Graná es muy especial: carocas, malafollá a manta, poetas castigados con el olvido o fusilados…
Miguel: serías un buen quintillero, lástima que en Córdoba la sultana no haya carocas.
Coco, las mías tampoco valen un duro. Este año no está nadie en vena… Bueno sí: tu hermano con su cuento, que ha estado genial. ¿Qué tal Almería?
Glòria: Andaliucía también es un sentido fatalista de la vida, un atraso de siglos, una falta de expectativas… El humor es sólo una válvula de escape.
Abrazos,
AG
Va bien lo de juan en Almeria, pero aquí vamos de mal en peor con este verano que viene cumpliendo con su calendario y su mala leche. Menos mal que nos quedan los paseos por estos blogs tan enriquecedores. Ahora me voy a dar una vuelta por los «Archisílabos» y voy a dejar una perla que me he encontrado esta mañanitita precursores de la Noche de San Juan.
mañanita precursora, claro.
[…] a aparecer en este blog al llegar la fiesta local del Corpus Christi. En los últimos años (2011, 2012, 2013 y 2014). Normalmente, junto a mis quintillas, incluía las oficiales, que siempre se […]
[…] normativo) se llena de gente que curiosea entre los viejos tilos buscando las quintillas y sus carocas. Acabo de fotografiarlas para compartirlas en este blog. Añadiré las mías, como vengo haciendo […]